#salon restaurante azhor: Yo no lo llamaría ni siquiera restaurante. Un bar con mantelería un poco mejor y punto. Comida que no se correspondía a las calidades vendidas, personal lento y pasota discutiendo en plena sala (aunque trataban de disimularlo, imagino que por las condiciones en las que estarán trabajando, pues da la impresión de un negocio basado en estirar el chicle recortando en todo excepto en el precio al cliente). Mi hermana que fue quien nos invitó acabó muy dolida, pero la educación le hizo guardar la compostura. Pero la guinda fue el tema de los niños: nos dijeron que tenían cuidadoras para que jugaran mientras comíamos. ¡Vaya tela! A una de las chicas tuve que llamarle la atención ya que la pillé \"in fraganti\" dándole voces a mi hijo de una forma muy violenta y total, lo único que hicieron fue pintarles la cara y tenerlos sentados casi todo el rato. Un desastre, vamos. No se lo recomiendo a nadie, en absoluto. Con lo grande y las posibildades que tiene el recinto, qué mal le hace caer en unas manos tan torpes para dedicarse a este negocio. hace 1 decade 7 meses